En una jornada significativa para la comunidad de Medicina
Humana, la Universidad Ricardo Palma llevó a cabo la Ceremonia
de Elección de Internado Médico en el Auditorio de Multifunciones
de la Facultad de Psicología. Más de 200 estudiantes de los
ciclos 11 y 12 participaron en este acto institucional, mediante el
cual se les adjudicó una plaza para iniciar su internado médico en
diversas sedes de salud pertenecientes a las DIRIS Lima Centro,
Lima Sur, Lima Este, Lima Norte y DIRESA Callao del Ministerio
de Salud.
Este evento marca uno de los momentos más trascendentales en la
trayectoria académica de los futuros médicos, ya que el internado
constituye la etapa de mayor inmersión clínica, en la que los
estudiantes asumen responsabilidades profesionales, fortalecen sus
competencias y consolidan los conocimientos adquiridos a lo largo
de la carrera.
Un paso hacia la práctica profesional
Durante la ceremonia, se destacó que el internado médico
representa “el puente definitivo entre el aula y el ejercicio real de la
medicina”. En esta etapa, los estudiantes rotan por servicios
esenciales como Medicina Interna, Cirugía, Pediatría, Ginecología y
Emergencias, enfrentándose directamente a situaciones clínicas de
alta complejidad bajo la supervisión de profesionales
experimentados.
Se resaltó, además, el compromiso de la URP por garantizar
procesos transparentes y equitativos en la asignación de plazas,
permitiendo que los estudiantes inicien su internado en
establecimientos de salud estratégicamente seleccionados para
reforzar su formación y ofrecerles diversas realidades hospitalarias.
Impacto para los estudiantes y aporte al sistema de salud
La adjudicación de estas plazas no solo significa un logro
académico, sino también una contribución concreta a la salud
pública. Los internos serán parte activa de los equipos de atención
en hospitales y centros de salud de Lima y Callao, fortaleciendo la
capacidad asistencial de la red del Ministerio de Salud.
Para los estudiantes, este proceso simboliza el inicio de su
autonomía clínica, el desarrollo de habilidades interpersonales, la
toma de decisiones éticas y la consolidación de su vocación de
servicio, aspectos fundamentales en la formación de un médico
humanista y competente.